Dos meses sin publicar una entrada, son muchos días, muchas horas, muchos sentimientos no compartidos...
Una mala racha, como la gran mayoría desgraciadamente, y quién me conoce sabe que ha sido mala mala, pues adoro escribir y el no poder hacerlo ha sido duro, muy duro. Pero parece que las cosas cambian!
Hasta ahora he tenido todo el tiempo del mundo para hacer todo tipo de cosas, y sin embargo no he hecho ni la mitad de lo que me hubiera gustado hacer. Yo no funciono así. Necesito tener un mañana, un mañana que ha tardado mucho en llegar, pero que ha llegado. Y ahora que me faltan horas para respirar es cuando mi cuerpo, mi alma y mi corazón están en perfecta armonía y me da tiempo a hacer todo lo que tengo que hacer!! Parece increíble, pero es cuando mi vida es totalmente un caos cuando me siento más feliz, realizada como mujer, como madre.
No podría dedicar mi blog a explicar todo lo que ha ocurrido en estos dos meses de ausencia, prefiero seguir adelante con mi blog por todo lo que viene por delante, ilusiones, metas, oportunidades...
Me siento fuerte para afrontar mi día a día, para levantarme cada mañana teniendo mil cosas por hacer y sabiendo que acabaré agotada pero feliz, inmensamente feliz por tener que hacerlo. Porque aunque hay veces que vemos que no llega el mañana. os puedo asegurar que llega, depende de nosotros que lo haga antes o después!
Espero que, aunque tardías, mis palabras os lleguen, os hagan pensar o simplemente pasar un buen rato, y si produce una sonrisa mi corazón latirá con fuerza, la que me mandáis todos lo que me leéis.
Gracias por estar ahí. Buenas noches!
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